La industria musical está en continua evolución. Igual que los sonidos cambian con el tiempo, también lo hace la tecnología. Actualmente el autotune goza de mucha popularidad: en este post analizamos qué es y para qué se utiliza esta herramienta.
La tecnología en la industria musical
La tecnología entró de lleno en la industria musical a partir de los 70, pero fue en los 80 cuando la digitalización de la música revolucionó la producción musical al permitir la comunicación entre instrumentos musicales y dispositivos electrónicos.
A medida que los ordenadores se volvieron más accesibles y potentes en las décadas de 1980 y 1990, surgieron diferentes tipos de software de producción musical (Pro Tools, Cubase, Logic Pro) que permitían grabar, editar y producir música de manera más eficiente y flexible.
Sin embargo, ninguna herramienta ha gozado de una popularidad tan plena como el autotune.
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¿Qué es el autotune?
Como decimos, la tecnología ha revolucionado la forma en que se produce, graba y se escucha música. El autotune es controvertido porque existe la creencia de que mejora las capacidades de los artistas de manera artificial, o de otro modo, camufla las deficiencias con un sonido que altera la capacidad vocal real.
Este software de procesamiento de audio corrige las desviaciones en la afinación de las voces. Desarrollado por Antares Audio Technologies en los 90, se ha vuelto omnipresente en la industria musical: lo utilizan productores, ingenieros de sonido y artistas para afinar y manipular las voces de manera creativa.
Este software, originalmente diseñado como una herramienta para corregir las imperfecciones vocales, se ha convertido en un elemento integral en la creación de muchas grabaciones modernas.
¿Para qué sirve el autotune?
La función principal del autotune es corregir las notas vocales que están fuera de tono. Cuando un cantante no logra alcanzar la nota correcta durante una grabación, el autotune puede detectar automáticamente esta desviación y ajustarla para que esté en línea con la afinación deseada.
Esto se logra mediante la manipulación digital de la frecuencia fundamental de la voz, lo que resulta en una corrección instantánea y en tiempo real de las imperfecciones vocales.
Si bien su función principal sigue siendo la corrección de la afinación, los productores musicales han encontrado formas innovadoras de utilizar el autotune para modificar y mejorar el sonido de las voces de maneras únicas y expresivas. En otras palabras, hoy es una herramienta creativa utilizada para lograr una amplia variedad de efectos vocales.
Los debates y polémicas en torno al autotune
El autotune ha sido objeto de polémica por varias razones. En primer lugar, su uso ha desatado debates sobre la autenticidad de los artistas y sus habilidades vocales. Muchos críticos argumentan que el autotune permite a los cantantes corregir imperfecciones vocales, lo que podría crear una falsa impresión de talento. Este debate se intensifica cuando se cuestiona la capacidad de los artistas para presentarse en vivo sin depender de la tecnología para afinar sus voces.
Del autotune también se ha dicho que distorsiona el sonido natural de la voz y puede llevar a una homogeneización del sonido en la música popular.
Si hay un artista famoso por popularizar el autotune ese es el rapero T-Pain. Su estilo distintivo junto con el uso de esta herramienta le ha granjeado aclamación y críticas a partes iguales.
Antes de él la pionera más destacable fue Cher, que popularizó en 1998 con el tema "Believe" el uso del autotune como efecto estilístico en lugar de simplemente una herramienta de corrección vocal. Aunque la canción fue un éxito comercial y contribuyó a definir una era en la música pop, generó debate sobre si el autotune debería utilizarse como una característica de la producción musical o como un medio para ocultar deficiencias vocales.
En MÁSMÓVIL esperamos haberte ayudado a entender qué es el autotune y cómo funciona. Sin duda esta herramienta estará presente en la música durante mucho más tiempo, y probablemente su uso seguirá generando intensos debates.