El mundo está cambiando y con él la conectividad. Hasta ahora, la infraestructura de red que hace posible la conexión a Internet en un hogar estaba algo limitada geográficamente, pero con la tecnología satelital, Internet ya llega hasta al rincón más aislado del planeta.
Los satélites, diseñados con tecnologías de vanguardia, están siendo impulsados por una carrera global en la que participan tanto grandes empresas privadas como agencias gubernamentales. Su objetivo es garantizar una conectividad total para llevar Internet a zonas que habían sido impensables, bien por los costes o por las limitaciones físicas.
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¿Cómo es el internet por satélite?
Para lograr el objetivo, hay proyectos en marcha como Starlink de SpaceX, OneWeb y el programa europeo IRIS², que lideran la innovación, mientras que iniciativas nacionales, como el español Spainsat NG I, también juegan un papel importante al combinar avances tecnológicos con necesidades estratégicas específicas.
La nueva generación de satélites para internet de alta velocidad se basa en funciones clave. Una de las más importantes es la utilización de órbitas terrestres bajas (LEO) que permiten reducir la latencia, acercando los tiempos de respuesta a los de las redes de fibra óptica. También la integración de antenas de "phased array" y procesadores digitales reconfigurables en órbita, que ofrece una flexibilidad sin precedentes, permitiendo ajustar la cobertura y la capacidad según la demanda.
Estos satélites no solo están pensados para el uso comercial, sino también para aplicaciones gubernamentales y militares, donde la seguridad y la resiliencia son fundamentales. Tecnologías como la protección antiinterferencias y la capacidad de operar en múltiples bandas de frecuencia (como Ku, Ka y X) están marcando la diferencia, haciendo posible desde la gestión de desastres hasta el soporte de misiones críticas en tiempo real.
El satélite español Spainsat NG I
Dentro de este panorama, el Spainsat NG I, lanzado el pasado 30 de enero de 2025 desde Cabo Cañaveral en un Falcon 9 de SpaceX, supone un ejemplo de cómo los países están adaptando estas innovaciones a sus propias necesidades. Ha sido desarrollado por Hisdesat en colaboración con Airbus y Thales Alenia Space. Este satélite español destaca por su enfoque en comunicaciones seguras para el gobierno y las Fuerzas Armadas, con capacidades avanzadas como antenas activas en banda X y sistemas anti-jamming.
Aunque su propósito principal es estratégico, con cobertura desde América hasta Asia, su tecnología comparte similitudes con los sistemas comerciales de alta velocidad, lo que pone de manifiesto cómo los avances en un ámbito pueden influir en el otro. Por otro lado, empresas como Amazon, con su iniciativa Kuiper, planean desplegar miles de satélites para competir con Starlink, mientras que países como China avanzan en su propia constelación, Guowang.
Pero aunque este camino vaya a resolver la brecha digital y pretenda conectar cada rincón del globo, plantea nuevos desafíos como el de la gestión del tráfico orbital y la sostenibilidad espacial.
Desde MASMOVIL esperamos que te haya parecido interesante esta información. Como verás, el futuro de la comunicación y la conectividad a internet vía satélite se antoja muy interesante.
